La Repúbl ica Dominicana planteó ante la Organización d e Estados Americanos (OEA) que la situación de Haití ha llegado a un punto dramático debido al nivel de violencia e inseguridad por el control territorial que han logrado las pandillas de secuestradores.
El ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, dijo que República Dominicana seguirá colaborando dentro de sus posibilidades, pero advirtió en que debe quedar claro que no hay ni habrá una solución dominicana a la crisis haitiana.
“República Dominicana seguirá colaborando dentro de nuestras posibilidades, pero debe quedar claro: no hay ni habrá una solución dominicana a la crisis haitiana; ésta solo encontrará respuesta con el esfuerzo concertado de los propios haitianos”, dijo Álvarez.
Consideró urgente que la asamblea general de la OEA instruya al secretario general a trabajar junto a la delegación haitiana y la Comisión para ofrecer la asistencia técnica requerida por Haití en el manejo de puertos.
La propuesta dominicana es que se utilice uno de los instrumentos a mano de la OEA, como es la El Distrito Nacional y las provincias de Santo Domingo, Santiago, La Altagracia y Valverde son las demarcaciones del país donde se registra una mayor cantidad de nacimientos de madres haitianas en hospitales de la red pública.
Mientras cada año, los centros del país registran un incremento sistemático en la cantidad de partos y cesáreas que se realizan a madres haitianas, con una tendencia a septiembre de este año de un aproximado de 88 partos por día, por lo que se infiere que aumentaría el Comisión Interamericana de Puertos (CIP), cuya misión incluye la cooperación hemisférica para la protección y seguridad portuarias.
“El acceso al combustible es un elemento esencial, que en este momento se ha convertido en un asunto de vida o muerte por el bloqueo de los puertos por las pandillas. La Comisión Interamericana de Puertos puede desempeñar un rol vital para destrabar esta situación”, dijo.
“Las pandillas han bloqueado la distribución de combustible, saqueado hospitales, secuestrado centenares de personas para cobrar rescates millonarios, imposibilitado la distribución de alimentos, contribuyendo a la grave crisis alimentaria, perpetrado numerosas masacres y violaciones, sin que la Policía Nacional Haitiana pueda, por sí sola, revertir esta situación. Algunos conocedores de la situación haitiana han señalado que, si no se acude en ayuda de Haití pronto, la autoridad estatal en ese país podría colapsar en cuestión de semanas o meses”, dijo el canciller ante Comisión Interamericana de Puertos (CIP), cuya misión incluye la cooperación hemisférica para la protección y seguridad portuarias.
“El acceso al combustible es un elemento esencial, que en este momento se ha convertido en un asunto de vida o muerte por el bloqueo de los puertos por las pandillas. La Comisión Interamericana de Puertos puede desempeñar un rol vital para destrabar esta situación”, dijo.
“Las pandillas han bloqueado la distribución de combustible, saqueado hospitales, secuestrado centenares de personas para cobrar rescates millonarios, imposibilitado la distribución de alimentos, contribuyendo a la grave crisis alimentaria, perpetrado numerosas masacres y violaciones, sin que la Policía Nacional Haitiana pueda, por sí sola, revertir esta situación. Algunos conocedores de la situación haitiana han señalado que, si no se acude en ayuda de Haití pronto, la autoridad estatal en ese país podría colapsar en cuestión de semanas o meses”, dijo el canciller ante la Asamblea General de la OEA. Agregó que las autoridades haitianas “han reconocido que necesitan asistencia internacional para recuperar el control exclusivo del uso legítimo de la fuerza y reestablecer el orden y la paz social. Solo después de haber logrado esto puede llevarse a cabo un plan integral para el desarrollo de Haití”.
“Debemos ser proactivos, nuestras manos no están atadas. Esta organización tiene mecanismos para brindar apoyo inmediato a Haití. Uno de esos instrumentos es la Comisión Interamericana de Puertos (CIP), cuya misión incluye la cooperación hemisférica para la protección y seguridad portuarias”, expresó Álvarez. Agregó que el acceso al combustible “es un elemento esencial, que en este momento se ha convertido en un asunto de vida o muerte por el bloqueo de los puertos por las pandillas.
La Comisión Interamericana de Puertos puede desempeñar un rol vital para destrabar esta situación. Por tanto, consideramos urgente que esta Asamblea instruya al Secretario General a trabajar junto a la delegación haitiana y la Comisión para ofrecer la asistencia técnica requerida por Haití”.
Enfocado en cómo superar la crisis actual, Álvarez manifestó que “la experiencia regional nos indica que Haití requiere un diálogo político amplio, inclusivo, sostenido y de buena fe, que permita a los distintos actores lograr un pacto de gobernabilidad que restaure la legitimidad democrática, la institucionalidad y la confianza de la comunidad internacional”, apuntó.
Agregó que la región tiene que entender que “este es el nudo gordiano de la crisis y, por lo tanto, debe encaminar todos los esfuerzos necesarios para facilitar ese diálogo”, puntualizó el canciller dominicano.
DEMOCRACIA CRISTIANA
Advierte peligro por crisis en Haití
La Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA) expresó su preocupación ante los graves hechos de violencia y la inestabilidad política y social en Haití y exhortó a los actores políticos y sociales de esa nación a la búsqueda de formulas de acercamiento, mediante el diálogo productivo y desinteresado en la procura del restablecimiento del orden institucional y la paz en Haití.
Expresa su apoyo al gobierno de Luis Abinader y reconoce que no puede ser responsabilidad del pueblo dominicano solucionar la crisis haitana.