Dajabón,
A pesar de las reiteradas denuncias y el evidente caos vehicular, las autoridades locales aún no han tomado acción concreta para reparar los semáforos dañados en varias intersecciones críticas de Dajabón.
Calles como Gastón Fernando Deligne con Pablo Reyes, Dulce de Jesús Senfleur con Calle Beller y Calle Duarte, así como Presidente Enríquez con Nilo Gerardo Blanco, siguen operando prácticamente sin control, con semáforos fuera de servicio o en condiciones deterioradas que agravan el tránsito y exponen diariamente a ciudadanos a accidentes.
No se trata de una simple falla técnica. Es una amenaza directa a la seguridad de quienes transitan diariamente por estas vías. La falta de señalización funcional no solo complica la movilidad, sino que pone en peligro vidas humanas, especialmente en horas pico, donde el caos y la confusión dominan el flujo vehicular.
Uno cruza esas esquinas con miedo. No sabes si el otro conductor va a frenar o va a seguir de largo,” comenta Tony, quien transita todos los días por las diferentes intersecciones.
Lo que pedimos no es nada extraordinario: solo que los semáforos funcionen como deben. Es prevención, no lujo,” agregó otro comunitario.
Las voces se multiplican, todas coincidiendo en lo mismo: el problema es visible, constante y representa un riesgo real. Hasta el momento, no se han visto brigadas de reparación ni se ha ofrecido un informe oficial sobre las acciones que se tomarán para corregir la situación.
Por: Yameirys Acevedo