Unas 33 muertes y 5,660 casos de dengue registra el país en lo que va de año, enfermedad que se mantiene bajo niveles de alerta, dado el aumento de casos que presenta este año en comparación con el año pasado, así como la amenaza del surgimiento de nuevos brotes en comunidades más afectadas por el paso del huracán Fiona.
Ayer, las autoridades sanitarias recordaron que el mayor riesgo de brote de dengue ocurre a dos o tres semanas de haber ocurrido un fenómeno atmosférico, como es el huracán Fiona, que azotó al país recientemente, por lo que este es el momento oportuno para que las familias que viven en áreas impactadas eliminen de los entornos de sus hogares envases que acumulan agua.
Revelaron que fruto de las intervenciones en las provincias impactadas por el huracán, hasta el momento no hay brotes de enfermedades, y sólo se ha registrado un pequeño brote de diarrea en un recinto penitenciario de Samaná, que fue controlado de inmediato.
Tras tres semanas
El director de Epidemiología, Ronald Skewes, explicó que dos a tres semanas después de un evento atmosférico se incrementa el riesgo de mayor casos de dengue, por lo que este es el momento oportuno para las intervenciones y que las familias procedan a revisar los entornos de sus hogares.
Con ello se busca, señaló, que puedan eliminar de sus alrededores los envases que tengan agua para evitar que se conviertan en criaderos del mosquito transmisor.
Recordó que el dengue es uno de los eventos de notificación obligatoria inmediata, por lo que es importante que cada médico o centro de salud que reciba un caso haga la notificación oportuna para que el sistema pueda tomar las medidas adecuadas. A su vez, Gina Estrella Ramia, directora de Gestión de Riesgo del Ministerio de Salud y coordinadora de las intervenciones que se hacen en esas zonas, explicó que hasta la fecha sólo se tiene un caso de diarrea vinculado al consumo de agua contaminada.
Alerta
Leptospirosis.
Gina Estrella dijo que además de la vigilancia epidemiológica y la atención médica, en las zonas afectadas, que incluye esta semana a San Cristóbal, donde hubo crecidas de ríos y cañada, se está interviniendo con fumigación, descacharrización, distribución de mosquiteros, entre otras acciones para prevenir brotes de dengue, malaria y leptospirosis.
Descacharrización.
Dijo que además de la vigilancia epidemiológica y la atención médica, en las zonas afectadas, que incluye esta semana a San Cristóbal, donde hubo crecidas de ríos y cañada, se está interviniendo con fumigación.