Ante el aplazamiento de la medida de coerción contra Alejandro Castro Cruz, la familia del niño Donelly Martínez, en conjunto con Comando Audio, música del Cibao, se lanzaron a las calles a protestar.
Toda la avenida Las Carreras fue copada por cientos de personas caminando con carteles, carros con enormes bocinas, motoristas, mientras miembros de la Policía Nacional y la Digesset vigilaban la zona.
“Hasta que se dé sentencia de 30 años a ese criminal, nosotros vamos a estar en las calles”, dijo Luis Esteban Abreu, presidente de la Asociación Nacional de la Industria de la Música.
“El apoyo no es de Santiago, es del país entero y del mundo por el abuso que se cometió aquí, por una bocina de tal vez 5,000 pesos, quitarle la vida a un niño”, agregó.
Desde ayer, varias provincias se unieron a las protestas como forma de repeler la acción del policía y pidiendo justicia por Donelly Joel Martínez, de 11 años.
Minsterio Público
Alejandro Castro de la Cruz, de 30 años, oriundo de Yamasá, en la provincia Monte Plata y radicado aquí, se desempeñaba como cabo de la Policía Nacional hasta el domingo 12 de febrero, cuando le arrebató la vida a Donelly.
De acuerdo a la solicitud de medida de coerción, el Ministerio Público establece que “abusando de la autoridad que le confiere la ley como miembro de la Policía Nacional, el imputado insistía en incautar la bocina, intentando la víctima y testigos Anthony Ysauri Martínez convencer al imputado de no llevársela, momento en que este, en actitud violenta, abrupta y desafiante discutía con la víctima y le rocía en sus ojos gas pimienta ocasionando que se aturdiera y se retira del lugar”.
El expediente sostiene que “De la Cruz aprovechó para de manera arbitraria” retirar la bocina del vehículo de un testigo, portando “de manera visible y amenazante su arma de reglamento”, y acercándose nuevamente hacia la víctima Anthony Martínez, apuntándole con la pistola manipulada, procede a disparar impactando mortalmente al niño de 11 años, en el brazo izquierdo con entrada y salida y luego en el tórax, ocasionándole la muerte. “Herida por proyectil de arma de fuego, muerte violenta, de etiología médico legal homicida,…”, indica el Inacif.