La jueza de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de La Altagracia, Francis Yojary Reyes Diloné, dictó prisión preventiva por un año como medida de coerción en contra del profesor John Kelly Martínez, quien es imputado como principal sospechoso de la muerte de Esmeralda Richiez Martínez, de 16 años de edad.
Martínez, quien está imputado de crimen y violencia de género e intrafamiliar, cumplirá la prisión en el Centro de Corrección y Rehabilitación Anamuya, de Higüey.
Por el caso también recibió medida de coerción, consistente en presentación periódica, Rubiel Morrillo Martínez, primo del imputado, quien enfrenta cargos por su complicidad y fue sometido a la justicia por la violación de varios artículos del Código Penal.
Provocó la muerte
La instancia con la solicitud de medida de coerción detalla que Martínez, de forma voluntaria, le provocó a la víctima laceraciones, abrasiones y contusiones que le produjeron el deceso debido al desgarro vaginal, con hemorragia aguda severa externa e interna y shock hemorrágico como mecanismo terminal de muerte, según consta en el informe de autopsia.
Los hechos
Respecto al caso, la investigación indica que en horas de la noche del pasado 12 de febrero la adolescente salió desde el hogar donde residía con sus padres en Vista Alegre, La Otra Banda, Higüey, en compañía del maestro, así como de Morrillo Martínez y otras tres alumnas menores de edad.
Indica que, al retornar a su hogar, alrededor de las 12:00 de la noche, la joven llegó pálida y sangrando, por lo que sus padres la ayudaron y quedó en su habitación.
Al día siguiente los padres de la adolescente la encontraron muerta en el baño de su residencia.
Probable condena
Martínez, imputado por la muerte de la adolescente de 16 años, Esmeralda Richiez, podría ser condenado a 10 a 15 años de cárcel.
El ministerio público ha calificado provisionalmente los hechos como violatorios a los artículos 265, 266 y 331 del Código Penal Dominicano, sobre violación sexual con violencia física.
La muerte de la joven provocó una ola de indignación y condena de todos los sectores de la ciudadanía, debido a que Esmeralda Richiez era alumna del profesor Martínez en La Otra Banda, Higüey, en la provincia La Altagracia.