De las 34 mil tareas que posee el proyecto La Cruz de Manzanillo, apenas tiene bajo cultivo el 7% de estas, a pesar del respaldo gubernamental.
Este proyecto ubicado en el distrito municipal de Palo Verde, Monte Cristi, se considera el más grande del país.
A 82 años de su fundación, ha sido un símbolo de prosperidad bananera, pero hoy lucha contra el abandono administrativo.
Inaugurado en 1943 como una alianza entre el régimen de Rafael Trujillo y la estadounidense “Grenada Company”, este coloso agrícola fue diseñado para exportar banano y dinamizar la economía local. Sin embargo, décadas de mala gestión lo han reducido a una sombra: apenas 2,600 tareas están activas (1,300 de banano, 1,050 de plátanos y el resto en yuca, batata, maíz y melones).
Julio César Estévez, administrador actual, admitió que el proyecto “no se manejó con criterio técnico ni gerencial” en el pasado. Asegura que trabajan para reactivarlo: “Estamos rehabilitando las plantaciones y diversificando cultivos”.
Crisis laboral
En su apogeo, “La Cruz de Manzanillo” empleaba a miles; hoy solo sostiene 120 puestos. Pese a recibir RD$6.1 millones mensuales del gobierno (el 88% para nómina), su rentabilidad es nula. El Ministerio de Agricultura aporta combustible, fertilizantes, pesticidas y maquinaria, pero los resultados siguen siendo marginales.
Analistas atribuyen el declive al uso político del proyecto. “Se desvirtuó su objetivo original: ser un motor económico para la región y el puerto de Manzanillo”, señaló una fuente del sector agrario.