El Día Mundial del Corazón es propicio para tomar acciones para tener sano este importante órgano, tomando en cuenta que las enfermedades cardiovasculares representan la principal causa de mortalidad a nivel mundial y en República Dominicana impactando en más de un 30% a personas con edades comprendidas de 30 a 69 años en la República Dominicana.
Las autoridades de salud emitieron este miércoles un documento con siete consejos dirigidos a que la población mantenga sano su corazón.
Mientras que la Asociación de Representantes, Agentes y Productores Farmacéuticos, Inc. (ARAPF), motiva a la población a sensibilizarse sobre las enfermedades cardiovasculares, su control y tratamiento adecuado.
Las acciones preventivas deben estar en manos del cada ciudadano y de las autoridades.
El cardiólogo Samuel Ramos, presidente del capítulo Norte de la Sociedad Dominicana de Cardiología, exhortó a las autoridades hacer más esfuerzos y dedicar mayor presupuesto a la salud del corazón de los dominicanos, siendo las enfermedades cardiovasculares la principal causa de muerte en el país
Consejos
Entre esos consejos gubernamentales colocados en redes sociales del Ministerio de Salud Pública se encuentran mantener un peso saludable y los niveles de colesterol y triglicéridos bajo control; hacer ejercicios; revisar regularmente la presión arterial, evitar el consumo de alcohol y tabaco, alimentarse con una dieta saludable y asegurarse de dormir lo suficiente, porque de lo contrario ello podría aumentar el riesgo de hipertensión, obesidad y diabetes.
ARAPF insta a la detección temprana de enfermedades cardiovasculares
La Asociación de Representantes, Agentes y Productores Farmacéuticos, Inc. (ARAPF), resalta que en situaciones de enfermedades crónicas como las afecciones del corazón se evidencian la importancia de la accesibilidad de medicamentos preventivos de venta libre para llevar salud a esas zonas donde la atención médica puede ser difícil.
Refiere que los expertos indican que el uso de medicamentos cardioprotectores y una detección temprana, podría significar una mejora en el pronóstico de estas afecciones y en la prevención de los eventos cardiovasculares, como infartos. Por esto se recomienda empezar a visitar de manera regular a un médico cardiólogo a partir de los 45 años.