Ante la inminente apertura de un nuevo proceso de selección para la Suprema Corte de Justicia (SCJ), el jurista Julio Cury propuso formalmente al Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) la modificación de su reglamento interno para optimizar y racionalizar la evaluación de los aspirantes.
La propuesta busca evitar que aquellos profesionales que fueron evaluados en procesos recientes tengan que repetir las vistas públicas en un periodo corto, argumentando que las competencias y el perfil de un candidato no sufren variaciones significativas en pocos meses.
Cury planteó que los aspirantes evaluados por el CNM en un plazo igual o inferior a los nueve meses, y que no resultaron electos, queden exentos de someterse nuevamente al rigor de la evaluación presencial para las nuevas vacantes.
“El CNM podría remitirse a las actas y videos de la reciente evaluación, integrándolas al proceso venidero. Obligarlos a repetirlo en tan corto tiempo carecería de justificación objetiva”, afirmó el abogado.
Según el jurista, reevaluar a un candidato en lapsos de 3, 6 o 9 meses no aporta información nueva de relevancia y representa un uso innecesario de tiempo y recursos institucionales.
Adujo que esta medida permitiría al Consejo concentrar sus esfuerzos en los nuevos perfiles que no participaron en la convocatoria anterior.
Fortalecimiento de la institucionalidad
Cury enfatizó que las competencias profesionales y la solvencia moral de los abogados y jueces «no varían de la noche a la mañana». En ese sentido, la modificación sugerida reforzaría tres pilares fundamentales del sistema como eficiencia, razonabilidad y coherencia.
Cargas innecesarias
Para el jurista, duplicar las evaluaciones en periodos tan breves transmite un mensaje equivocado sobre la suficiencia del esfuerzo previo.
“Se trata de fortalecer la institucionalidad y evitar cargas innecesarias tanto para el CNM como para los profesionales que aspiran a servir desde el más alto tribunal judicial”, concluyó.