El “Nunca Jamás”, que gravita sobre el liderazgo de Danilo Medina para aspirar a la presidencia y vicepresidencia de la República, se ha convertido en uno de los principales obstáculos electorales que enfrenta el opositor Partido de la Liberación Dominicana (PLD), en su lucha por regresar al poder.
La organización ha tenido que adelantar su activismo político en busca de preparar contrareloj una figura presidencial para el 2024 y tratar de sacudirse el polvo de la derrota. Con este objetivo ya se han lanzado al ruedo la exvicepresidente Margarita Cedeño, el ex procurador general, Francisco Domínguez Brito, y el alcalde de Santiago, Abel Martínez.
En las altas instancias del PLD tampoco se descarta la aspiración del empresario Gonzalo Castillo, candidato derrotado en las elecciones del 5 de julio del año pasado, y uno de los principales artífices junto a Medina, de la catastrófica división de 2019.
También se cita al influyente exministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta, a quien se atribuye por lo bajo una destacada participación en la sorpresiva elección del secretario general Charlie Mariotti, manejada como un desafío al líder o una traición al potencial ganador Rubén Bichara.
Ayer se aplazó el anuncio de las aspiraciones presidenciales de otro miembro del comité político del PLD, el exministro de Interior y Policía, Carlos Amarante Baret.
La corrupción
Todo este proceso se inicia en medio de cuestionamientos y sometimientos a la justicia de altos dirigentes y militantes peledeístas, exfuncionarios del gobierno de Medina y familiares de la familia presidencial, vinculados con actos de corrupción administrativa en la pasada gestión del PLD.
Estos acontecimientos en desarrollo se convertirán en un pesado baldón para los precandidatos presidenciales peledeístas, que se verán precisados a recorrer una y otra vez el territorio nacional, para posicionarse no solo en las primarias internas del PLD, sino en el favor popular ante una eventual candidatura presidencial.
Otro obstáculo a vencer será el desgaste de la maquinaria peledeísta acumulado en dos décadas de su paso por el poder, y la gran catidad de recursos que habría que invertir en una empresa de esta naturaleza cuando restan más de dos años para el proceso interno y las elecciones generales de 2020.
Los precandidatos
Margarita Cedeño, la única mujer que aspira a la candidatura presidencial por el PLD, tiene una amplia experiencia de Estado. Fue primera dama en los dos períodos de gobierno del ex presidente Leonel Fernández (2004-2008 y 2008-1012). Además vicepresidenta de la República en los dos períodos del expresidente Danilo Medina(2012-2016 y 2016-2020), con prolongada ejecutorias en los programas sociales gubernamentales.
La figura de Cedeño levantó encendidas polémicas cuando se distanció políticamente de su esposo Leonel Fernández, quien renunció del PLD y fue candidato presidencial del partido Fuerza del Pueblo, mientras ella aceptaba nuevamente la candidatura vicepresidencial por la boleta peledeísta junto a Castillo.
En el caso de Domínguez Brito, fue fiscal del Distrito Nacional (1997-2000), procurador general de la República, (2004-2006), senador por Santiago (2006-2010), precandidato presidencial del PLD (2011), ministro de Trabajo 2011-2012), procurador general de la República (2012-2016), ministro de Medio Ambiente (2016-2018) y precandidato presidencial (2019).
Abel Martínez fue diputado por Santiago desde el 2002 y se desempeñó como Presidente de la Cámara de Diputados en el período 2010-2016. Fue electo alcalde de la ciudad de Santiago en las elecciones municipales del año pasado.
El PLD gobernó el país en los períodos 1996-2000 y 2004 hasta el 2020, cuando fue desplazado por el presidente Luis Abinader y el Partido Revolucionario Moderno (PRM).