Dajabón,
La fuerte crecida del río Masacre provocó múltiples daños en la frontera entre República Dominicana y Haití, dejando a su paso destrucción en cultivos agrícolas, viviendas, infraestructuras y afectando gravemente a comunidades tanto del lado dominicano como del haitiano, especialmente en Juana Méndez.
Según testimonios de residentes consultados en la zona fronteriza, el desbordamiento del río ocasionó el desplome de un tramo del puente que conecta con el pueblo haitiano, así como la ruptura de parte del muro del canal de los haitianos. “Anoche el agua se llevó todo tres personas. Juana Méndez quedó destruida. Hace más de cincuenta años que no veíamos una crecida como esta”, expresó un nacional haitiano, notablemente afectado por la situación.
La crecida, que sorprendió a muchos en horas de la madrugada, también provocó inundaciones en decenas de viviendas en ambos lados de la frontera. Los afectados relataron momentos de angustia en los que se escuchaban gritos de auxilio y corridas desesperadas para ponerse a salvo.
“Estábamos en contacto con un equipo del COE y decidimos acercarnos a la frontera para ver lo que estaba ocurriendo. Fue impactante ver cómo el río se desbordó de una manera que, según personas mayores de la zona, no se veía desde hace más de medio siglo”, comentó un representante local.
Esta emergencia pone nuevamente en evidencia la vulnerabilidad de la zona fronteriza ante fenómenos naturales, y la necesidad de fortalecer la infraestructura y los protocolos de respuesta binacionales.
Por: Yameirys Acevedo
Imágenes por: Carlos Bueno