La fundación sin fines de lucro “Quiéreme como Soy», ha sido protagonista de un cambio palpable en la percepción de la discapacidad en la República Dominicana, logrando convertir en realidad un sueño que se propició hace 14 años en el corazón de Óscar Villanueva, su fundador, y que hoy expande sus objetivos de alcance más allá de crear conciencia sobre el derecho a la inclusión de las personas con dificultades cognitivas.
Este altavoz solidario, que insta al abrazo y apoyo de las capacidades y necesidades especiales que tiene cada ser humano, se ha trazado una nueva línea de meta hacia la educación respeto al trato afable y comprensivo de quienes tienen un desarrollo neurológico distinto, sin características físicas específicas que los distingan del resto, pero con competencias que dificultan su convivencia en sociedad.
Un nuevo enfoque a la conciencia
“Hemos tenido muchos logros puntuales que nos han permitido entender hacia dónde nos dirigimos ahora. Nosotros nos hemos encontrado, a partir de todo lo que hemos aprendido de la inclusión, que existe una condición con la cual la sociedad convive y no comprende, y se llama neurodiversidad”, indicó Villanueva al realizar una visita al despacho del director del Listín Diario, Miguel Franjul, en víspera del desarrollo de la Temporada del Cariño 2024, a celebrarse este domingo 20 de octubre.
Será en el Pabellón de Vóleibol del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte el que se vestirá de los colores rojo, blanco y azul, característicos de Quiéreme Como Soy, y marcará la pauta de una nueva lucha por los niños y niñas neurodivergentes, entendiéndose este concepto, por lo menos en las aulas, como quienes tienen diferentes formas de procesar la información y de experimentar el mundo.
A partir de aquí, se inicia una campaña con un enfoque inaugural de contenido audiovisual, esto debido a que según su fundador, Quiereme Como Soy, tras tantos años de lucha por la inclusión, terminó por concluir que no puede vivir a espaldas de la neurodiversidad.
Hay una gran cantidad de dominicanos que desconocen de la condición, incluso si la padecen, y por tanto no saben cómo tratarla. Además, el país no cuenta con datos poblacionales que puedan señalar en porcentaje la cantidad de personas que tienen problemáticas motoras, físicas o intelectuales.
“A partir de ese sentimiento, que hemos estado expuestos de lo que es la neurodiversidad, nosotros hemos concluido de que no podemos vivir de espaldas a esto y que lo mismo que nosotros hacemos con una parálisis cerebral, con un síndrome de down, con un autismo, perfectamente lo podemos hacer y nos va a dar muchísimo más efecto a nivel social”, indicó Villanueva.
Rompiendo las barreras de la inclusión
Desde su nacimiento, Quiereme Como Soy, ha logrado llegar de manera directa a millones de personas a través de sus cinco pilares de acción directa:el programa “Coletour”, con el que visitan escuelas e instituciones laborales; la producción de campañas audiovisuales de concientización, que han generado más de cien millones de vistas nacional e internacionalmente con sus piezas cortas; y eventos multitudinarios que, desde el 2010 han servido como espacio de reconocimiento y fiesta a la discapacidad.
A esto, se suman las ayudas metálicas realizadas a siete instituciones que trabajan
por la discapacidad a nivel nacional; así también, por el respaldo de las autoridades gubernamentales, han participado en políticas públicas, siendo miembro del Consejo Nacional de la Discapacidad y en las mesas de discusión en los temas concernientes a la inclusión en nuestro país.
“A pesar de todo nuestro esfuerzo y el de todas las instituciones involucradas, hoy nos enfrentamos a retos familiares, sociales, escolares, laborales y de atención médica, por lo que hay que seguir trabajando para que la inclusión sea una realidad”, afirma Óscar Villanueva.