Sectores de la sociedad se han unido a la marcha pacífica que encabezan campesinos de Sánchez Ramírez en contra de la construcción de una presa de cola de parte de la empresa minera Barrick Gold, en el Naranjal en Cotuí.
Religiosos católicos, líderes políticos de oposición y miembros de la sociedad civil acompañan al pueblo que camina en viacrucis a pie por la carretera que lleva hasta la multinacional canadiense en la provincia.
Uno de ellos es el padre Rogelio Cruz, quien aseveró que la función de la Iglesia y otras personalidades en esta lucha ha de ser de acompañamiento a los campesinos, que son quienes deben liderar la lucha y tienen el protagonismo.
Virginia Antares, excandidata presidencial por el partido Opción Democrática, habla sobre los impactos de una presa de cola para el subsuelo y los recursos hídricos. Indicó que el gobierno debe proveer información y desmilitarizar las comunidades.
“Están sufriendo la contaminación y ahora verse en el riesgo de perder sus tierras con la intención de la mina de ampliar y hacer una presa de cola”, expresó.
Sostuvo que estas presas de desechos tienen el riesgo de desbordarse, dañando consigo los recursos hídricos y el subsuelo.
“Información clara para las comunidades, al pueblo dominicano y diálogo; no se puede dialogar militarizados”, dijo en alusión al armamentismo visible en las comunidades afectadas por la construcción de la presa.
Roque Espaillat (El cobrador), excandidato presidencial, se unió a la proclama del pueblo manifestando que la minera extranjera busca apropiarse del oro que le pertenece al pueblo.
“El oro es del pueblo dominicano; esta es una empresa extranjera que quiere desplazar campesinos que han vivido durante décadas y creen que pagando un puñado de monedas le pagan décadas de vida”, resaltó.
Fernando Peña, del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y representante de la comunidad en la comisión mediadora del diálogo, expresó que lo que busca la Barrick es “quedarse con las manos libres” sin compromiso.