Agencia AFP
Washington, Estados Unidos
Estados Unidos superó en lo que va de 2025 su récord de casos de sarampión en más de 30 años, según un balance de la universidad Johns Hopkins revelado en momentos que el secretario de Salud de Donald Trump es acusado de empeorar esta crisis sanitaria.
El sarampión, altamente contagioso, había sido erradicado en el país gracias a la inmunización, pero a finales de enero se inició un brote en medio de una caída en las tasas de vacunación y una creciente desconfianza de la población en las autoridades de salud.
Se han confirmado 1.277 casos en lo que va de año, un 60% de ellos en el estado de Texas, indicó la Universidad Johns Hopkins.
Es el mayor número de contagios en Estados Unidos desde 1992.
Al menos tres personas -que no estaban vacunadas- han fallecido a causa de la enfermedad. Entre ellas dos niños pequeños.
Varios expertos sostienen que el balance de casos se ha subestimado y expresaron su preocupación por la falta de reportes.
La última muerte infantil por esta enfermedad en Estados Unidos se remontaba a 2003, tres años después de que se declarara oficialmente erradicado el sarampión gracias a la vacunación.
El último brote de sarampión se registró en 2019 en comunidades ortodoxas judías en Nueva York y Nueva Jersey, con 1.274 casos, pero sin muertes.
El sarampión causa fiebre, problemas respiratorios y erupciones cutáneas, y en algunos casos complicaciones más graves, como neumonía e inflamación del cerebro, que pueden provocar secuelas graves y la muerte.
El secretario de Salud estadounidense, Robert Kennedy Jr., ha sido acusado de empeorar la situación por difundir información falsa sobre la vacuna contra e el sarampión, paperas y rubeola (MMR), por ejemplo, cuando afirmó es peligrosa y contiene restos de fetos.
El brote surgió a finales de enero en una zona rural de Texas donde vive una comunidad religiosa menonita, una población ultraconservadora y con una tasa baja de vacunación.
Los vecinos de Estados Unidos también registraron este año nuevos brotes: Canadá tiene más de 3.500 casos, incluida una muerte. La mayoría en la provincia de Ontario.
Y en México, se contabilizan 2.600 casos y nueve muertes, según la Organización Panamericana de la Salud.