DAJABON,- Una banda de delincuentes compuesta por jóvenes haitianos están arrasando con todo en esta ciudad, mientras las autoridades policiales al parecer hacen caso omiso a esta situación que tiene a la población desesperada.
Los malhechores en horas de la noche y hasta de día, penetran a viviendas, tiendas de celulares, y otros tipos de negocios y se llevan todo lo que encuentran, y para hacerlo rompen puertas, ventanas, persianas y hasta los hieros protectores de los locales.
El más recientes de estos hechos ocurrió en una casa propiedad del señor Fulvio Tavares, ubicada en uno de los sectores de la parte Este de esta ciudad, donde los delincuentes para penetrar rompieron los hierros protectores de una de las persianas, luego cortaron y destruyeron alambres, bombillas, enchufes y las cámaras de seguridad y dejaron hecho un reguero las cosas que no pudieron llevarse.
Las imágenes captadas por las cámaras de seguridad antes de desmantelarlas, muestran claramente como dos jovencitos haitianos se pasean y hacen de todo dentro de la casa.
El propietario de esta vivienda lleva varios años viviendo y trabajando en los Estados Unidos y se preparaba para venir de retirada a descansar en su pueblo natal, pero ese sueño ha sido frustrado por delincuentes haitianos.
Igual ocurrió con la señora Ana Carrasco, quien junto a su familia se vio obligada a abandonar su pueblo Dajabón, e irse a la montaña, luego que la pequeña empresa de la que se mantenía en esta ciudad, fue quebrada por los constantes robos que les perpetraron los ladrones y todo quedó en que eran visitas de cortesías y autoridad ni nadie pudieron controlarlos.
Una señora, cuyo nombre omitimos por razones entendibles, narró que esos novecientos haitianos penetraron a su vivienda y se llevaron dos celulares bastantes caros y una laptop, y procedieron a llevar un video con la imagen de los ladrones al DICRIM y nadie hizo nada.
La población se queja que esos jóvenes haitianos viven permanentemente en esta población sin hacer nada, mientras otros haitianos indocumentados se pasean a cualquier hora de la noche por la ciudad y no son investigados.
Los robos se han incrementados de manera alarmante este pueblo y no se observa a la policía realizar patrullajes por los sectores y barrios de esta población, lo que refleja inseguridad ala familia dajabonera.