La lista de republicanos dispuestos a apoyar al próximo candidato del presidente Joe Biden a la Corte Suprema “es más larga de lo que se imaginan”, bromeó recientemente con periodistas el segundo demócrata en el Senado.
El senador Dick Durbin, de Illinois, se negó a dar nombres. Pero está claro que el senador Lindsey Graham, republicano de Carolina del Sur, está entre los primeros de la lista.
Graham, aliado del expresidente Donald Trump, se encuentra entre un puñado de republicanos que han declarado su voluntad de romper con las líneas partidistas y votar por la elección de la Casa Blanca para reemplazar al juez Stephen Breyer, quien se jubilará. Aún no se ha anunciado quién podría ocupar su lugar.
Si Graham o cualquier republicano termina respaldando al candidato de Biden en el Senado, el cual está dividido 50-50, será una nueva prueba para las ambiciones del presidente —declaradas durante mucho tiempo y rara vez logradas— de ver a Washington adoptar un enfoque más bipartidista tras la amargura de la era Trump.
Los demócratas dicen que obtener un voto bipartidista es prioridad para la próxima batalla de confirmación. “Será grandioso para el Senado. Será grandioso para la Corte Suprema”, dijo Durbin después de una reunión en la Casa Blanca el jueves. “Espero que podamos lograr ese objetivo”.
Queda por ver si los demócratas pueden ganar el voto de Graham, y el de otros republicanos como las senadoras Susan Collins de Maine y Lisa Murkowski de Alaska.
En otras ocasiones, Graham ha señalado su voluntad de asociarse con los demócratas, pero al final termina apoyando a su partido.
Él lideró los esfuerzos en el Senado para defender a Brett Kavanaugh, un candidato de Trump para el tribunal superior, de las acusaciones de agresión sexual, y fue Graham quien abandonó descaradamente una promesa de abstenerse de confirmar a un juez en año de elecciones presidenciales. Como presidente del Comité Judicial del Senado, ayudó a sentar a Amy Coney Barrett en la corte pocos días antes de la victoria electoral de Biden en noviembre de 2020.
Pero Graham también tiene historial de trabajo con los demócratas. Fue el único republicano en el comité que votó por dos de los candidatos a la Corte Suprema del entonces presidente Barack Obama. También apoyó a unos 30 candidatos judiciales de Biden.
Si bien algunos en el Partido Republicano se han burlado de la promesa de Biden de nominar a una mujer negra, algo histórico, Graham ha defendido la idea.
Pero hay una trampa. Graham quiere la opción sea su paisana de Carolina del Sur, la jueza federal Michelle Childs, y ha dicho que su voto será “mucho más problemático” si no es ella.