Preparar la comida del mediodía para una familia de cinco a seis miembros, cuesta actualmente al menos 400 pesos.
Para poder rendir los pocos recursos que disponen tienen que reducir las porciones de productos que requieren para el almuerzo.
Las mujeres dijeron que para preparar una comida consistente en la “bandera dominicana”, arroz, habichuelas y carne, tienen que comprar entre dos y dos libras y media de arroz a un costo de 80 a 100 pesos.
También dos libras de carne de pollo, que es la más barata, pero que en los colmados la expenden entre 80 a 85 pesos, dependiendo el lugar, lo que hace un total de 120 a 130 pesos.
Asimismo, explicaron que una libra de habichuelas se vende a 60 pesos, un potecito de aceite de los más pequeños tiene un valor de 55 y que a eso se añaden otros ingredientes como los sazones, pasta de tomate y que si le añaden ensaladas el costo del almuerzo sale más caro.
La ama de casa Ana Pichardo, residente en el sector de Pekín, al sur de aquí, dijo que en su casa viven ella, su esposo, cuatro hijos y un nieto y que para poder comer al mediodía tienen que disponer de más de 400 pesos.
Inversión
“Para quedar satisfechos tendríamos que comprar tres libras de arroz, pero lo hacemos con dos o dos y media, a veces lo acompañamos con berenjena o espaguetis, porque el dinero no nos alcanza para tanto”, indicó.
Sostuvo que a veces los hijos se les quejan porque se quedan insatisfechos, pero que tienen que hacer malabares para poder rendir los pocos recursos que tienen.
“Mi esposo trabaja como delivery en un pequeño supermercado, yo a veces vendo dulces y pastelitos para ayudarlo, porque el pobre va muy forzado y eso me apena”, declaró.
Asimismo, expresó que “la suerte es que en el establecimiento donde trabaja su pareja les fían y luego los días de pago se lo descuentan”, enfatizó.
Otras amas de casa dijeron que para poder rendir el dinero de que disponen para la preparación del almuerzo, han tenido que reducir obligatoriamente las porciones alimentarias, aunque al comer no queden satisfechos. “Peor es nada, hay que acostumbrarse”, insistió.
Otras jefas de hogares refirieron que prefieren no desayunar y hacer la comida más temprano”, enfatizó.
“Yo acostumbraba a cocinar a las 12.30 y a veces a la 1.00 de la tarde, pero ahora lo hago entre 11.45 a 12, porque no nos desayunamos, a veces con un pan y jugos de los que venden en polvo”, refirió otra ama de casa del sector de Cienfuegos, al Oeste de Santiago.
En cuanto a la cena, manifestaron que la carga es menos pesada, porque para una familia de seis miembros pueden hacerlo con tres plátanos que están a 15 la unidad y tres huevos que se expenden a ocho en los colmados y supermercados.
En otras ocasiones, compran panes, cuya unidad está a siete pesos y preparan jugo de los que venden en sobrecito, o sino chocolate de agua.
“La vida está dura, las amas de casa no sabemos que hacer, tenemos que trabajar por obligación”, comentó de su parte Georgina Peña, una empleada privada.
Alzas en comercios
Comerciantes consultados por Listín Diario, comentaron que los productos de la canasta familiar han aumentado considerablemente, después de la pandemia y que eso los afecta porque la gente está comprando menos.
“Todo ha subido, imagínate un producto que hace seis meses lo compraba a 25 pesos, ahora tiene que disponer 35 y más”, proclamó un comerciante del centro histórico de Santiago preguntado al respecto.
Alimentación.
Otras jefas de hogares refirieron que prefieren no desayunar y hacer la comida más temprano”.
“Yo acostumbraba a cocinar a las 12:30 y a veces a la 1.00 de la tarde, pero ahora lo hago entre 11:45 a 12:00 del día, porque no nos desayunamos; a veces comemos un pan y jugos de los que venden en polvo”, refirió otra ama de casa de Cienfuegos.
Comercio.
Comerciantes consultados comentaron que los productos de la canasta familiar han aumentado considerablemente, tras la pandemia.