Delegados de todo el mundo se reunieron el domingo en el balneario egipcio de Sharm el Sheij para conversaciones sobre la lucha contra el cambio climático, en un momento en el que el planeta también enfrentaba varios desafíos como la guerra en Ucrania, la inflación, desabastecimiento de comida y una crisis energética.
Los negociadores pasaron dos días frenéticos antes de la cumbre discutiendo si considerar oficialmente la cuestión de pérdida y daños, o reparaciones, a las naciones vulnerables afectadas por el cambio climático. La cuestión, que ha lastrado las conversaciones durante años, se acordó apenas unas horas antes de la inauguración de la cumbre.
En su discurso de apertura, el responsable del comité de científicos climáticos de Naciones Unidas recalcó la urgencia de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptarse a los efectos del calentamiento global.
“Esta es una oportunidad única en una generación para salvar nuestro planeta y nuestros medios de vida”, dijo Hoesung Lee, presidente del Comité Intergubernamental sobre Cambio Climático. El presidente saliente de las conversaciones, el funcionario británico Alok Sharma, dijo que los países habían hecho avances considerables en su última reunión en Glasgow.