“Hice mi cita por la página para venir a sacarle el pasaporte al niño y la tomé de una vez porque me decía que era para el 16 de enero, pero cuando me mandaron el correo decía que la fecha más cercana era para abril”, explicó indignada Loraida Deschamps, acompañada de su hijo, un menor para el que hacía el proceso de sacar el pasaporte por primera vez.
Así como Deschamps, decenas de personas a las afueras de la oficina principal de Pasaportes externaron sus quejas debido a los largos tiempos de espera que les son impuestos para las citas de rigor de la propia entidad.
De dos meses, e incluso hasta cuatro, es el tiempo que se está tomando el procedimiento que normalmente sólo tarda unos días y para el que, de hecho, Pasaportes tiene establecido un tiempo estimado de 15 días de entrega y seis horas para el VIP.
No hay libretas
Ayer cuando periodistas de Listín Diario se presentaron a las instalaciones de la Dirección General de Pasaportes, parecía como si los estuviesen esperando. Tras bajar del vehículo rotulado fueron abordados de inmediato por supuestos representantes del departamento de Comunicaciones de la institución, quienes limitaron el acceso a las instalaciones y aseguraron que mañana tendrían una rueda de prensa en la que hablarían de la situación.
No obstante, horas más tarde el viceministerio para Asuntos Consulares y Migratorio del Ministerio de Relaciones Exteriores, emitió un comunicado donde se excusan por la tardanza de la Dirección General de Pasaportes.
“Debido a la escasez de un insumo imprescindible para la confección de las libretas, no podrán realizar la entrega de los pasaportes necesarios para cubrir la demanda de emisión y renovación de pasaportes durante los próximos meses”, indica el documento, que además estableció que se había determinado que a partir de ese momento a los pasaportes a renovar se les aplicaría un sello para extender su vigencia durante un año más.
La renovación
Indistintamente a esta situación, varias personas a las que para ese momento no se les tenía respuesta, mientras muchas de sus citas ya establecidas les habían sido cambiadas para fechas más lejanas sin que se les diera ninguna explicación coherente.
“Si fuera que uno viene a sacar el pasaporte por primera vez yo no te digo nada, aunque me encuentre que tanto tiempo es una exageración, pero yo no digo nada porque uno lo ve como más pasable, pero para cambiar la libreta me están poniendo para marzo. Eso no tiene sentido”, dijo una persona que se identificó como Pedro. En el caso del joven adulto dominicano con ciudadanía alemana, que acudió para solicitar el pasaporte para su niño de dos años con intenciones de dirigirse hacia Alemania y para que allá reciba la acreditación ciudadana.
Aparentemente, en la institución a Pedro le habrían dado la ordenanza de comprar el pasaje aéreo de su dependiente y presentarse ante ellos dos días antes del vuelo para solicitar el documento de validación internacional, por lo que se encontraba visiblemente incómodo.