El alcalde de Nueva York, Eric Adams, negó haber agredido hace tres décadas a una mujer que lo demandó al amparo de una ley que expira este jueves y que permite a las víctimas de violencia sexual denunciar a sus agresores aunque los hechos hayan prescrito.
La acusación, presentada vía electrónica el miércoles por la noche, responsabiliza al alcalde de «agresión sexual, lesiones y discriminación laboral por razón de género y sexo de la demandante, represalias, entorno laboral hostil e imposición intencionada de angustia emocional», según el documento presentado en el Tribunal Superior de Justicia de Nueva York.
Los hechos habrían ocurrido en 1993, cuando ambos trabajaban en la alcaldía de Nueva York.
Estas alegaciones «no son en absoluto ciertas», reaccionó este jueves festivo, día de Acción de Gracias en Estados Unidos, el alcalde, un expolicía de origen afroestadounidense.
«Nunca haría nada para herir a nadie», declaró Adams, que fue elegido alcalde de Nueva York en 2022.
Antes, su portavoz había asegurado que el alcalde «no sabe quién es esta persona». «Si alguna vez se conocieron, no lo recuerda», zanjó.
La denunciante, Lorna Beach-Mathura, que acusa también a otras instituciones públicas de la ciudad en la misma querella civil, pide una compensación financiera mínima de 5 millones de dólares, que debería fijar un jurado.
Eric Leroy Adams, de 63 años, realizó su carrera en la policía neoyorquina, de la que fue capitán antes de entrar en la política local con el Partido Demócrata.
El alcalde es objeto de otra investigación sobre el origen de los fondos para su campaña a la alcaldía de Nueva York, que busca determinar si recibió dinero del gobierno de Turquía.
En los últimos días, el Tribunal Supremo de Nueva York ha recibido varias denuncias de agresión sexual amparadas en la Adult Survivor Act, que permite presentar casos ya prescritos y que tras un año en vigor, expira este jueves a medianoche.
Además de Adams, también han sido denunciados el vocalista del grupo de hard rock Guns N’ Roses, Axl Rose, el actor Jamie Foxx, y el rapero Sean Combs que, pese a que llegó a un acuerdo con una denunciante, ha vuelto a ser objeto de una nueva demanda por agresión sexual este jueves.