El gobierno de Venezuela llamó recientemente “cipayo” al gobierno dominicano del presidente Luis Abinader por la confiscación de una aeronave vinculada a Nicolás Maduro que estaba en República Dominicana.
La palabra “cipayo” tiene una etimología que se remonta al persa “sepāhi”, que significa “soldado”, sin embargo, a través del portugués “sipay”, el término llegó al español como cipayo.
Pero, entonces, ¿qué significa?
Históricamente, en los siglos XVIII y XIX, se denominaba cipayos a los soldados nativos de la India que servían en los ejércitos coloniales de potencias europeas como Francia, Portugal y Gran Bretaña, de acuerdo con el “World History Encyclopedia” (en español, la Enciclopedia de la Historia del Mundo).
Con el tiempo, el término adquirió una connotación despectiva, utilizándose para referirse, según la Asociación de Academias de la Lengua Española, a individuos que “por motivos ideológicos o económicos, apoyan intereses extranjeros en detrimento de los nacionales”.
En este sentido, un cipayo (cipaya para género femenino) es visto como un “secuaz a sueldo” que defiende causas ajenas, a menudo en contra de los intereses de su propia comunidad o país. Así lo señala el diccionario de la lengua española (RAE).
“Su odio hacia Venezuela (el del secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio) lo lleva ahora al delito abierto confiscando ilegalmente un avión de PDVSA con la complicidad del gobierno cipayo de la República Dominicana”, leía el comunicado difundido por la cancillería venezolana.
El gobierno de Maduro tildó de “ladrón de aviones” al funcionario estadounidense Rubio por el decomiso de la aeronave durante su visita a territorio dominicano.
“La incautación de este avión venezolano, utilizado para evadir las sanciones estadounidenses y el (control de) lavado de dinero, es un poderoso ejemplo de nuestra determinación de responsabilizar al ilegítimo régimen de Maduro por sus acciones ilegales”, dijo en X Rubio al finalizar su primera gira como secretario de Estado por cinco países de América Latina.
Según el Departamento de Estado, funcionarios de Venezuela utilizaron esa aeronave para volar a Grecia, Turquía, Rusia, Nicaragua y Cuba, y la habían llevado a República Dominicana para mantenimiento.
En septiembre de 2024, durante la administración del expresidente Joe Biden, otro avión oficial de Venezuela, modelo Dassault Falcon 900EX, fue confiscado en República Dominicana y trasladado al estado de Florida. Autoridades estadounidenses aseguraron que había sido comprado “ilegalmente” por 13 millones de dólares mediante una empresa fantasma.