En un informe de Página Abierta, el Banco Central asegura que la política monetaria, entre otras disposiciones de flexibilidad financiera sustenta la estabilidad económica que exhibe el país.
El reporte de los técnicos del Banco Central explica la reducción de la inflación, la estabilidad cambiaria y los efectos de transmisión de las tasas de interés encaminados hacia la baja en el transcurso de los años.
El artículo: “Estabilidad macroeconómica para la innovación y el crecimiento en la economía dominicana, calzado bajo la firma de Osvaldo Lagares, Ph.D., del Departamento de Regulación y Estabilidad Financiera del BCRD, enfatiza que República Dominicana ha exhibido una estabilidad económica ejemplar debido a la implementación oportuna de medidas de política monetaria, cambiaria y financiera adoptadas por el Banco Central, conforme a las disposiciones de la Junta Monetaria.
Explica que la implementación del Esquema Metas de Inflación en 2012 fue trascendental para promover la estabilidad y el crecimiento en la economía dominicana, al tiempo de señalar que apostar por la estabilidad ha sido determinante para la sostenibilidad del crecimiento y la financiación del desarrollo en la economía dominicana.
Las medidas de políticas implementadas han contribuido a un crecimiento económico sostenible, que ha pasado de un promedio de 4.3% durante la primera década del año 2000 a un crecimiento promedio de 4.9% desde 2010, con expectativas de que se mantengan entre 4.0% y 5.0% para 2026.
Indica que el PIB per cápita ha pasado de US$2,659 a finales de los 90, a US$5,680 en 2010 y US$11,541 en 2024, más que duplicándose desde la implementación del Esquema de Metas de Inflación, convirtiendo al país en una economía de ingresos medios, conforme a la clasificación del Banco Mundial.
Recalca que el enfoque de las medidas de política monetaria y financiera ha rendido los resultados esperados en la economía y pone de ejemplo que durante la década de los 90 la inflación registró un promedio de 14.5% y en la antesala de la crisis financiera global de 2009 en 5.8%, se ha mantenido estable en cuanto al rango meta de 4.0% ± 1.0% desde 2012, ubicándose en 4.23% interanual a octubre 2025.
Asimismo, el tipo de cambio ha mantenido una variación cambiaria promedio interanual de 3.6% desde 2012, en contraste con una depreciación promedio anual que se ubicaba en 11.3% durante la primera década de 2000.
Mientras, el promedio de las tasas de interés activas y pasivas se han reducido de 27.6% y 15.6% durante los años 90, a 13.3% y 6.4% durante el período 2012-2024, al situarse en 13.6% y 6.3% en noviembre de 2025.
“A través de una política monetaria que procura mantener la estabilidad de precios, las tasas de interés se han moderado, las fluctuaciones cambiarias se han reducido y se ha gestionado adecuadamente la liquidez de los intermediarios financieros”, indica.
Regulación financiera y la supervisión basada en riesgos
El artículo señala que la Junta Monetaria ha modernizado los Reglamentos Monetarios y Financieros para procurar el normal funcionamiento del sistema financiero en competitividad y eficiencia, reduciendo los factores de riesgo, como el riesgo de crédito, liquidez, mercado y riesgos operacionales, con la finalidad de promover el financiamiento de las actividades productivas.
En ese contexto, destaca las actualizaciones realizadas al Reglamento Cambiario (2025), Sistema de Pagos (2025), Auditorías Externas (2019), Microcréditos (2018), Seguridad Cibernética y de la Información (2018), Evaluación de Activos (2017), Gestión Integral de Riesgos (2017), entre otros de igual relevancia, para continuar adecuando la normativa local a las disposiciones del Macro Regulador Internacional para los Bancos propuesto por el Comité de Supervisión Bancaria de Basilea, el cual procura mantener la estabilidad del sistema financiero internacional.
Además, se creó el Comité de Políticas Macroprudenciales y Estabilidad Financiera en 2017, integrado por el Banco Central y la Superintendencia de Bancos, para examinar la estabilidad del sistema financiero dominicano, y las medidas de política macroprudencial necesarias para reducir y mitigar el riesgo sistémico, esto es, agrega, el riesgo de interrupción generalizada de la prestación de servicios financieras, el cual puede tener consecuencias para la economía real.
Sistema financiero
Las medidas de regulación financiera han robustecido la gestión de riesgos de las entidades de intermediación financiera, las cuales exhiben una fortaleza patrimonial considerable y han contribuido, con su capacidad profesional e innovativa, a la resiliencia general que exhibe la economía dominicana.
Sus niveles de capital superan el 6.0% del PIB, sustentados en una rentabilidad del patrimonio (ROE) de 21.7% y del activo (ROA) de 2.6% al cierre de septiembre de 2025, indica. A su vez, el coeficiente de solvencia se ubica en torno a 18.4%, conforme a las últimas informaciones disponibles de la Superintendencia de Bancos.
La reducción de la volatilidad de la tasa de cambio ha brindado certidumbre a los agentes económicos para planificar sus operaciones comerciales con un adecuado flujo de divisas.