El exsenador y agrónomo Adriano Sánchez Roa denunció este domingo que la escasez y el aumento del precio de la carne de pollo en el país, que supera los RD$100.00 por libra en numerosas localidades, son el resultado directo de la falta de planificación gubernamental frente a los efectos del denso calor sobre la producción avícola nacional.
El titular agropecuario del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) dijo que durante los meses de altas temperaturas, es normal que los pollos experimenten una reducción natural de su peso corporal y especialistas del sector agropecuario han explicado este fenómeno.
Sánchez Roa cuestionó que el Ministerio de Agricultura no haya tomado previsiones para enfrentar este escenario, como el estímulo a una producción complementaria o la aplicación de estrategias de mitigación climática y, en su lugar, los acusó de alentar las importaciones, en detrimento de la seguridad alimentaria del país.
Como resultado de esta falta de acción, señaló que las autoridades están importando 500 mil libras de carne de pollo, medida que calificó como un duro golpe para los productores locales y que aumenta la dependencia del país de los mercados internacionales.
Recordó que la industria avícola dominicana produce mensualmente unos 21.5 millones de pollos, con un peso promedio de 4.8 libras por ave, pero que, debido al calor, ese peso puede reducirse entre 0.4 y 0.5 libras por unidad, lo que implica una pérdida considerable en términos de oferta global.
“Estamos ante una crisis que no ha sido provocada por factores inesperados, sino por la ausencia de una política agrícola estratégica, sostenible y adaptada al cambio climático. La avicultura nacional, que ha mostrado un notable desarrollo y estabilidad durante años, está siendo debilitada por esa improvisación”, sostuvo.
Sánchez Roa hizo un llamado urgente a la institución y a los organismos responsables para que asuman su papel con seriedad y que su visión no sea inmediatista, sino también a mediano y largo plazo.
“Es necesario aplicar políticas públicas que fortalezcan la producción nacional, garanticen el abastecimiento estable del mercado y protejan tanto a productores como a consumidores. No se puede seguir improvisando en un sector tan vital como el agroalimentario”, concluyó el agropecuario.