Residentes en el municipio Cabral de la provincia Barahona han visto como los cortes de energía sistemáticos, cuyos apagones superan hasta las 10 horas de duración, han transformado sus vidas, con el incremento de la inseguridad ciudadana.
Denuncias de habitantes de esta localidad, realizadas por distintas vías de comunicación -redes sociales, programas de radio o de televisión local- reportan un incremento de acciones delictivas, como consecuencia de los cortes constantes en el suministro de energía eléctrica, los cuales tienen al “borde del colapso” a comerciantes del municipio, así como a la población en general.
Propietarios de salones de belleza, dueños de colmados, cafeterías, peluquerías y centros expendios de bebidas alcohólicas responsabilizan a la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur (Edesur) por los prolongados cortes de la electricidad, porque están convencidos que le falta de luz es la que provoca inseguridad en la comunidad.
Además, sostienen que los cortes de electricidad afecta la economía local, así como la vida cotidiana de los habitantes de este municipio.
Sin embargo, se quejan porque aún con los sistemáticos apagones, Edesur sigue cobrando facturas elevadas que no se refleja en la cantidad de horas – luz suministrada a la población, lo que consideran como un “vulgar robo” por parte de esta Empresa Distribuidora de Electricidad en su área de concesión.
El comercio organizado afirma en sus constantes de denuncias en medios locales, redes y plataformas sociales, que no soporta más esta situación, pues aseguran que a causa de los apagones se registra un incremento de la inseguridad en el municipio, traduciéndose en robo en sus establecimientos, así como a la ciudadanía que se desplaza hasta sus negocios a adquirir algún producto.
“La falta de energía eléctrica genera pérdidas económicas significativas al comercio, sobre todo, a pequeños y medianos comerciantes, porque esta situación nos tiene amenazados, hasta el punto, que pensamos seriamente en cerrar nuestros establecimientos, de los cuales sostenemos a nuestras respectivas familias”, dijo una dueña de un pequeño colmado en el Barrio Arriba.
Dueñas de salones de belleza tienen que suspender el servicio por falta de electricidad; propietarios de colmadones, colmados y de expendios de bebidas alcohólicas pierden productos que requieren refrigeración; cafeterías registran disminución en sus ingresos, mientras peluquerías se ven obligadas a tener que cerrar temporalmente sus emprendimientos como consecuencia de la falta de energía eléctrica en la comunidad.
Además de que sus establecimientos comerciales están siendo víctimas de los delitos, dueños de establecimientos comerciales afirman que la falta de luz propicia un ambiente inseguro, asegurando hay registro de aumento de los robos en calles, así como una mayor vulnerabilidad de la ciudadanía por las noches, situación que preocupa a habitantes de esta localidad.
Ante esa situación es que comerciantes del municipio llaman de forma “urgente” al Gobierno del Partido Revolucionario Moderno (PRM), encabezado por el presidente Luis Abinader, para que la gerencia de Edesur implemente soluciones inmediatas de mejoras del suministro eléctrico a esta población ante los cortes sistemáticos en el fluido eléctrico.
Afirman -de igual manera- que los prolongados apagones representan, no solo un problema de tipo social, causante de conflictividad, sino que se “constituye en un freno al desarrollo” de Cabral, lo cual pone en riesgo la economía, la seguridad y la estabilidad social de la comunidad.