Los testimonios afirman que la Escuela República de Haití, ubicada en la calle Josefa Brea, en el ensanche Luperón, Distrito Nacional, se veía en condiciones bastante rentables antes de ser demolida durante el gobierno de Danilo Medina con intenciones de remodelación, hace ocho años, cuando se instauró su calvario.
Reclamos entre huelgas y lloros, e incesantes listas de peticiones que fueron enviadas por las autoridades de este centro hacía el Ministerio de Educación (Minerd), han sido el itinerario a seguir desde entonces; y ahora, parece que por fin la agonía les parece más lejana con el anuncio de que en 15 días les será entregado el plantel que, a simple vista, luce casi terminado.
Los ingenieros y autoridades del Minerd han puesto su palabra y seguridad ante Dulce Delgado, directora de la escuela Haití, de que dentro de 15 días serán puestos a su disposición los otros tres edificios educativos, unas aulas extras y el comedor que abriría paso a que la escuela sea de tanda extendida, poniendo fin a la inhumana condición en la que se alfabetizaba su matrícula de 1,200 niños en ambas tandas. Durante los últimos ocho años los trabajos han avanzado a pasos de tortuga con la empresa de ingenieros que había sido contratada por el Estado