El presidente del Instituto Duartiano, Wilson Gómez Ramírez, calificó una reciente publicación del medio Vatican News, en la que critica la regulación de las políticas migratorias del país, como “una injusticia a nivel internacional que no demuestra la realidad migratoria nacional”.
«Es un asunto absolutamente injusto”, declaró Ramírez, destacando que República Dominicana ha sido “el Estado, el país, la nación, el pueblo que más ha contribuido con Haití”.
“Nadie como nosotros”, precisó, señalando que, pese a esto, “somos objeto de una feroz campaña que prácticamente es una extorsión».
El medio oficial de la Santa Sede denunció que estas medidas regulatorias restrictivas responden a un movimiento ultranacionalista que fomenta la violencia y el hostigamiento contra todos los extranjeros haitianos, comparándolo con “una cacería”.
“Es una verdadera caza al haitiano. Los capturan en cualquier lugar: en la calle, en el trabajo, en los hospitales, en sus viviendas”, comentó el medio. “Y no importa si son adultos o niños, los toman y los cargan en camiones”.
Ante esta declaración, la posición de Gómez Ramírez, como principal representante del Instituto Duartiano, es de auténtico rechazo al considerar que lo que se expresa en el artículo es para desinformar al mundo.
«Hay un esfuerzo de chantaje abierto contra la República Dominicana llamándonos xenófobos, llamándonos discriminadores, racistas y eso es un asunto que tenemos que rechazar», condenó el dirigente del organismo.
Agregó además que el Estado dominicano se encuentra obligado a lanzar una ofensiva diplomática para aclarar que República Dominicana está en su derecho autónomo con soberanía nacional de aplicar las condiciones migratorias que regulen la entrada de extranjeros haitianos al país como cualquier otra nación.
En ese sentido, el exministro de Defensa, José Miguel Soto Jiménez, reprendió el reportaje del portal oficial de noticias del Vaticano como “una campaña perniciosa al pueblo dominicano” que no expone en su totalidad el contexto entre las dos naciones, proyectando una imagen distorsionada y “esclavista” del país.
Sus afirmaciones fueron sostenidas en el marco del simposio «Situación de Haití y su implicación en la República Dominicana», quien junto con un grupo de especialistas se reunió para analizar las consecuencias de los problemas que enfrenta Haití y su repercusión en el territorio nacional.
Valoró la trascendencia de esta conferencia al considerar los peligros que entraña para el país la crisis de Haití y el ribete internacional que posee.
Hizo un llamado a la comunidad internacional por la indiferencia e irresponsabilidad que han mostrado en el tema y a una gran parte del empresariado que se ha volcado contra los intereses de la nación.