Todavía faltan cerca de 24 millones de dólares para la operación de trasladar el crudo que contiene un petrolero varado frente a las costas de Yemen y evitar una marea negra en el mar Rojo, lamentó este jueves la ONU.
«Es urgente conseguir este dinero para realizar la operación con éxito«, dijo a la prensa Farhan Haq, portavoz adjunto del secretario general de la ONU al término de una conferencia de donantes organizada por Reino Unido y Países Bajos.
En marzo, la ONU anunció que había comprado un inmenso navío cisterna para trasvasar el equivalente de un poco más de un millón de barriles de crudo del FSO Safer, varado frente al puerto estratégico de Hodeida (oeste de Yemen), que amenaza con partirse en cualquier momento, explotar o incendiarse, según los expertos.
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Pese a que no hay suficientes fondos, «seguimos creyendo que la operación sobre el agua podrá empezar antes de fin de mes», dijo Haq a la AFP, y precisó que la ONU tiene «mecanismos internos de financiación» que permiten esperar donaciones adicionales.
La operación sin precedentes para la ONU, cuyo costo ha aumentado exponencialmente, se calcula en 148 millones de dólares: 129 por el trasvase, y otros 19 millones para remolcar el Safer una vez que se haya vaciado y la seguridad del Náutica.
Con los 5,6 millones adicionales anunciados el jueves, la ONU ha recabado hasta el momento 105,2 millones, por lo que faltan todavía 23,8 millones.
«La justificación para actuar es clara: 20 millones de dólares ahora podrían ahorrar 20.000 millones de costos potenciales más tarde», comentó en un comunicado Achim Steiner, director del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que coordina el caso.
Construido en 1976, el FSO Safer, que sirve de terminal flotante de almacén y descarga, no ha tenido mantenimiento desde 2015 cuando Yemen cayó en una de las peores crisis humanitarias en el mundo debido a la guerra que opone al gobierno y a los rebeldes hutíes.
Según la ONU, el Safer contiene cuatro veces la cantidad de petróleo del Exxon Valdez, el petrolero que provocó en 1989 una de las peores catástrofes medioambientales de la historia de Estados Unidos.
En caso de marea negra, la ONU estima en 20.000 millones de dólares el coste de la limpieza sin contar con las potenciales consecuencias medioambientales, económicas y humanitarias.
Cerca de 1,7 millones de personas en Yemen dependen de la industria de la pesca y varios puertos que llevan alimentos a la población podría tener que cerrar en caso de catástrofe.