El Gobierno de Bahamas ha prometido unirse a la iniciativa de Kenia de liderar una «fuerza multinacional» de agentes de Policía para formar a las fuerzas de seguridad haitianas con el fin de hacer frente a la violencia de las pandillas.
El Ministerio de Exteriores de Bahamas, que ha «acogido con satisfacción» la decisión del Gobierno de Kenia, ha indicado que proporcionará 150 personas al equipo cuando quede autorizado por el Consejo de Seguridad de la ONU, al que ha pedido la aprobación de la resolución que permita el despliegue.
«Bahamas espera trabajar con Kenia y otros socios en Haití para ayudar en los esfuerzos para lograr la paz y la estabilidad. Agradecemos que esta sea, como declaró el ministro de Exteriores de Kenia, Alfred Mutua, una decisión de ‘(apoyar) a las personas afrodescendientes en todo el mundo, incluidas las del Caribe, y se alinea con la política de diáspora de la Unión Africana y nuestro propio compromiso al panafricanismo'», reza un comunicado.
Por su parte, el Gobierno de Estados Unidos ha felicitado a Kenia «por responder al llamamiento de Haití y por considerar servir como nación líder para una fuerza multinacional» en el país centroafricano «para ayudar a abordar la inseguridad causada por la violencia de las pandillas».
«Estados Unidos insta a las partes interesadas haitianas a tomar medidas urgentes para expandir el consenso político y restaurar el orden democrático, de conformidad con la Carta Democrática Interamericana», ha señalado el secretario del Departamento de Estado estadounidense, Antony Blinken.
El día anterior, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, animó a los Estados miembros de la ONU a unirse al anuncio de Kenia de desplegar agentes de Policía en Haití, con el fin de formar a las fuerzas de seguridad haitianas para hacer frente a la violencia de las pandillas.
Kenia, que no tiene relaciones diplomáticas con Haití, anunció este sábado que había aceptado liderar una fuerza multinacional en el país caribeño: «El compromiso de Kenia es desplegar un contingente de mil policías para ayudar a entrenar y ayudar a la Policía haitiana a restaurar la normalidad en el país y proteger las instalaciones estratégicas», según un comunicado.
Por su parte, el Gobierno de Haití agradeció este la iniciativa de Kenia, señalando que los líderes haitianos han recibido con «gran interés» la oferta y saludando «esta expresión de solidaridad africana. No obstante, este anuncio ha recibido críticas por parte del ex primer ministro haitiano, Claude Joseph, que fue el primero en reaccionar a la iniciativa de las autoridades kenianas, alegando que el país africano no es el más indicado para ayudar porque «está sumido en su propia crisis sociopolítica interna».
Haití se encuentra en medio de un escalada de violencia nacional, con zonas prácticamente controladas por bandas armadas, y ataques y secuestros diarios, que se han cobrado la vida desde principios de año de más de 1.400 personas, según estimaciones de Naciones Unidas. La crisis de violencia generalizada en el país se ha visto agravada por el colapso económico y la epidemia del cólera, por lo que el número de personas necesitadas de ayuda humanitaria en Haití se ha duplicado en los últimos cinco años.