El jefe de la diplomacia estadounidense Marco Rubio anunció este viernes haber ordenado revocar la visa al juez brasileño Alexandre de Moraes, a cargo del juicio por intentona golpista contra Jair Bolsonaro, después de que ordenara colocar una tobillera electrónica al expresidente.
La tensión entre Estados Unidos y Brasil escala casi a diario por el caso del ultraderechista Bolsonaro, a quien el presidente estadounidense Donald Trump parece apoyar incondicionalmente.
«La caza de brujas política del juez Alexandre de Moraes del Tribunal Supremo Federal de Brasil contra Jair Bolsonaro ha creado un complejo de persecución y censura tan amplio que no solo viola los derechos básicos de los brasileños sino que también se extiende más allá de las fronteras de Brasil para tomar como blanco a los estadounidenses», escribió Rubio en un comunicado.
«Por lo tanto, he ordenado la revocación de visas para Moraes y sus aliados en la corte, así como para sus familiares directos, con efecto inmediato», añade.
Rubio reitera que Trump «dejó claro que su administración exigirá responsabilidades a los extranjeros responsables de censurar la libertad de expresión en Estados Unidos».
Moraes forma parte del grupo de magistrados de la Corte Suprema que decidió enjuiciar a Bolsonaro.
Tanto Trump como Bolsonaro se consideran víctimas de persecución política.
Bolsonaro está acusado de conspirar para dar un golpe de Estado con el fin de mantenerse en el poder tras perder la elección frente al izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva en octubre de 2022.
Meses después, sus partidarios irrumpieron en las sedes de la Presidencia, el Congreso y la Corte Suprema en Brasilia, en una asonada que recuerda los ataques de simpatizantes de Trump en 2021 en el Capitolio, tras su derrota electoral frente al presidente demócrata Joe Biden.
En 2024 Moraes bloqueó temporalmente X en todo Brasil hasta que la red cumpliera su orden de eliminar las cuentas acusadas de difundir desinformación.
Posteriormente el magistrado ordenó suspender Rumble porque esta plataforma para compartir videos, popular entre los conservadores y la extrema derecha, se negaba a bloquear la cuenta de un usuario residente en Estados Unidos que era buscado por difundir desinformación.
Este viernes Moraes acusó a Bolsonaro de incitar «actos hostiles» de Estados Unidos contra Brasil para obstruir el juicio en su contra. Ordenó que le coloquen una tobillera electrónica para vigilarlo y le prohibió usar las redes sociales.
También se le prohibió el contacto con embajadas extranjeras y debe permanecer en su casa por las noches y los fines de semana, aunque él negó tener planes de huir del país.
El juicio de Bolsonaro ha generado una crisis diplomática entre Estados Unidos y Brasil.
Trump amenazó a la primera economía latinoamericana con aranceles del 50% a partir del 1 de agosto, lo que Lula calificó de «chantaje inaceptable» aunque no cierra la puerta al diálogo.