Dajabón, RD
El Mercado Fronterizo de Dajabón, espacio vital para el comercio binacional, se encuentra sumergido en un preocupante estado de contaminación y abandono. Calles internas llenas de basura, aguas estancadas, zinc y madera en mal estado, y desechos sólidos acumulados, muestran el deterioro en el que permanece un lugar que debería ser símbolo de desarrollo económico en la frontera.
Las imágenes hablan por sí solas: tramos completamente intransitables, charcos de agua contaminada y desperdicios arrojados sin control que no solo generan un mal aspecto, sino que además representan un serio foco de insalubridad para los comerciantes y compradores que acuden al mercado.
Los usuarios denuncian que esta situación no es nueva, pues desde hace meses se arrastran problemas de limpieza, falta de mantenimiento y una administración que parece no dar respuesta efectiva a las condiciones cada vez más precarias del lugar.




La contaminación no solo afecta la imagen del municipio, sino que también se convierte en una amenaza directa para la salud pública. El hedor, la acumulación de plásticos y la proliferación de insectos y roedores son prueba de que el mercado, en vez de progresar, se deteriora a pasos acelerados.
Mientras las autoridades locales se limitan a promesas y declaraciones, los comerciantes y ciudadanos cuestionan: ¿hasta cuándo el Mercado Fronterizo seguirá funcionando en medio de basura y desechos? ¿Será que este espacio, que mueve millones de pesos en comercio, no merece una gestión más responsable y digna?
Lo cierto es que el mercado continúa operando en condiciones deplorables, reflejo de una administración descuidada y de la falta de acciones concretas para garantizar un espacio limpio, seguro y digno tanto para los dominicanos como para los haitianos que cada semana se dan cita allí.
Por: Yameirys Acevedo.