Alemania, la economía más poderosa de Europa, está en ruinas. Inglaterra y Francia piden apoyo al Fondo Monetario Internacional (FMI). En los Estados Unidos, regresó el crimen político; mataron a Charlie Kirk.
En las cuatro naciones más poderosas de Occidente, los pueblos desprecian a sus gobernantes, quienes acusan a Rusia de todos sus problemas económicos. Buscan la guerra, esperando unificar a la población en torno a sus liderazgos fallidos.
Las dos grandes guerras europeas comenzaron cuando países de Europa Occidental atacaron a países eslavos: Austria atacó a Serbia en 1914 y Alemania a Polonia en 1939. Alemania recién envió tropas a Lituania, rodeando Kaliningrado, un enclave ruso en el Mar Báltico.
En el siglo XIX, Europa Occidental invadió sin razón a naciones eslavas en las guerras napoleónicas y en la de Crimea. Occidente contra Rusia repite esa historia: el “mundo civilizado” repite la barbarie.m