Por Wanda Espinal
Hoy no hay una historia, porque la historia eres tú que estás leyendo esto.
Piensa en cada paso que diste hacia tus objetivos. Incluso los avances más pequeños son importantes, ya que te acercan a tus sueños. Tal vez no hayas alcanzado todas tus metas, y eso está bien. A veces, los planes cambian y eso no significa que hayamos fallado.
Agradece por tu salud y tu vida. Para el próximo año, establece metas realistas y proponte diferentes plazos. Si te sientes abrumado, reevalúa tus planes. Recuerda que puedes lograr todo lo que te propongas, pero también es importante ser realista.
¿Cómo estás cuidando de tu salud? La salud física y mental son fundamentales para alcanzar tus metas. Dedica tiempo a ti mismo y a tu bienestar.
Nos envolvemos en el vaivén de los días, la cotidianidad y la rutina, que ponemos en último lugar cuidarnos. Ámate, cuídate y respeta tus límites. Solo así podrás disfrutar de tus logros y de las relaciones con tus seres queridos. Recuerda que todo tiene su tiempo.
Planifica y sueña en grande, deja que las cosas fluyan, pero también trabaja para lograrlo, las cosas no van a llegar a ti por magia