Por: Ana Vargas
No se trata de cambiar tu esencia, sino de crecer desde ella. Cada persona tiene una historia que la hace única, y en esa historia también hay fuerza, aprendizaje y valor.
Ser mejor no significa ser perfecto. Significa intentar cada día hacer las cosas con más calma, más respeto y más amor. A veces mejorar es escuchar más, hablar menos y pensar antes de actuar.
Dentro de ti hay un ser positivo que muchas veces se queda en silencio. Ese ser aparece cuando decides no rendirte, cuando eliges el bien aunque cueste, y cuando ayudas sin esperar nada a cambio.
La vida nos prueba, nos sacude y nos enseña. En cada caída hay una lección y en cada error una oportunidad para hacerlo mejor. No te juzgues tan duro, aprende y sigue adelante.
Ser positivo no es ignorar los problemas, es enfrentarlos con esperanza. Es creer que, aunque hoy no sea fácil, mañana puede ser distinto si mantienes una actitud sana y un corazón abierto.
Hoy es un buen momento para mirarte con cariño y confiar en ti. Sigue siendo quien eres, pero con más conciencia, más bondad y más luz. El cambio empieza dentro, y tú tienes todo para lograrlo.